domingo, diciembre 27, 2009

One

Ayer morí de celos de saberte de otra, no puede evitar compararme...salgo ganando. Mis bubis son más grandes y por supuesto más firmes, mi trasero no es chato ni mis caderas del tamaño de Chihuahua argh!!! En fin, que yo soy más bonita, buena y por supuesto con más clase...de donde las sacas eh? Sin clase y sin gracia, del montón pues. Tienen razón, siempre se quedan con las chicas aburridas, con las que no darán problemas y dirán a todo que sí. Que mi maldición será ser siempre yo misma, diferente a todas y sin miedo a mostrarme como se me da la gana haciendo lo que se me da la gana.
Y tú si que sabes quien soy.
Cuando estábamos juntos, en la intimidad, muchas veces me reprochaste que por que no era así todo el tiempo, que por que no te quería...y como iba a quererte si tu me orillaste a todo esto??
Desataste ese demonio de piernas abiertas que mantuve enjaulado tantos años.
Y tu tienes la culpa de que yo haya caído, cuando era la única que no lo había hecho, la que te ignoraba, la que no te encontraba guapo en lo absoluto, la que conocía tus técnicas por demás practicadas y hasta cooperé para hacerte un perro depredador con otras viejas ingenuas que todo te creían...igual que yo.
Todo por quedarnos solos, todo por pensar que yo tenía el control, pasar a tu depa a ver una película, aja si como no.
Te recargaste en mis piernas, y después subiste poco a poco ni cuenta me dí, cuanto volteé la cara tu boca estaba a un centímetro de la mía y lo único que yo quería era que me besaras y con toda tu práctica de años, te me hiciste del rogar, me dejaste así con ganas por algunos minutos...o tal vez tu también te la estabas pensando...o no. Mi cabeza pensaba a mil revoluciones por minuto, pero cuando sentí tu mano entre mis piernas simplemente dejé de hacerlo, solo atiné a quitarte la ropa y dejar que me hicieras el amor en el sofá.
Me gustaba contemplar tu nalgas tan perfectas que cabían entre mis manos, tú decías que te encantaban mis piernas, pero lo mejor era quedarnos dormitando. Te gustaba que te acariciara la espalda con mis dedos, subiendo y bajando con suavidad...eso te gusta hasta el día de hoy.
Fuimos amigos hasta ese día. Por que después me convertí en tu amante, la que pasaba a verte cada que tenías ganas, la que sabía que ir por café era empiernamiento seguro. La que te creyó cuando me dijiste que me querías y tontamente? te rechacé por creerme muy liberal y decir que sólo era sexo, la que no lo supo manejar y cayó en tus pinches redes de gigoló profesional. Por lo menos me enseñaste bien, hoy soy capaz de comportarme como tú me enseñaste, un buen acostón no significa que quiero ser tu novia ni que quiero casa aparte y tampoco que te da derecho a amarme.
Hoy muero de celos por saberte de otra, pero muero más por que sé que si te dejara entrar en mi cama otra vez ahí estarías. Y ni yo te dejo, ni tu terminas de atreverte.

miércoles, diciembre 09, 2009

Sueño o ensueño???

Como puede ser que el alcohol sea tan dañino y no te percatas de los que sucede en VERDAD alrededor tuyo. Hay momentos en los que esas imágenes que se comparten en la vida diaria son solo ilusiones e incluso fantasmas de algo que no es real. Había pensado que entre toda esa multitud te había encontrado y aunque nuestro lenguaje, en aquella ocasión, había tenido sintonía; hoy me doy cuenta de que fue un sueño.
Sí, yo y mi ridícula idea de haber hecho los movimientos adecuados para que me vieras con otros ojos, muy distintos a los que muchos antes que tú me miraron. Esa es la parte en donde siempre me equivoco; no distingo bien aquellos detalles que me mostraste, con toda alevosía, por la diferencia que tenemos en experiencia. No quería que me vieras como una más de tus conquistas de media noche y por desgracia sucedió. No sé si yo soy la culpable de este mal de amores que tengo de años, muchos años. Tal vez y esto fue provocado por los cuentos que me narraban en mi infancia. De cualquier manera y a estas alturas de mi vida me pregunto ¿por qué seguir pensando en que, en alguna parte hay alguien para mi? No es que lo ponga en tela de juicio sino que ahora después de la última conversación que tuvimos me dejaste sorprendida. Quedamos en que la verdad y la franqueza son nuestros puntos fuertes y asumo la parte que me corresponde de lo que sucedió. Las noches fueron algo que nunca olvidaré ¡si! Las platicas de reconocimiento de las tierras lejanas de cada uno, con sus valles y montes que forman parte de lo que somos en ocasiones territorios accidentados que son las cicatrices de guerra de esta vida. También está los tiempos, si esos en los que necesitas comerte el mundo en una sola sentada con la intención de compartirlo con alguien y sea testigo fiel de lo que se hace y ése, precisamente, fue el error de cálculo. Tan pronto como te conocí pensé que tú podías ser parte de ese momento, aunque lo fue por horas compartiendo la misma mesa. Al final de la velada me encontraba sola, con una buena copa de vino tinto en mi mano, hablando sola con mi propia consciencia diciéndome ella "en que cabeza cabe la posibilidad de que alguien como él fuera el indicado", absurdo por lo que decidí regresar a la realidad y dejar en mi memoria, en el baúl de los recuerdos, tu rostro, tu cuerpo y tus caricias. El amor no tiene edad así como, al corazón no se le puede engañar.

jueves, noviembre 12, 2009

Añoraba!!!

Añoraba nuestras conversaciones privada y aunque hoy fue un día especial, no me quito de la cabeza, que en ese mundo pequeño donde nos desenvolvemos, se haga notar que en nuestra relación, o como quieras llamarla, se está desarrollando de tal forma que me dejas desarmada; por ello es que me pones nerviosa. No puedo, me cuesta mucho trabajo mirarte a los ojos ya que ahí es donde te darás cuenta de lo que en el fondo siento y pienso. ¿Miedo? Tal vez y eso forma parte de lo que hace que me impida verte directamente sin que haya una mesa entre nosotros. Estoy segura que te has dado cuenta de eso, de que mientras haya una distancia muy prudente la mirada está enfocada, pero cuando el espacio se reduce a nuestro cuerpo, eso es totalmente distinto.
No sé si tus canas son algo de lo que me llama la atención, de lo que me atrae de ti, aunque hay algo que me hace desear estar en otro lugar contigo, ¿la cama? No lo sé. Es extraño pensar que dentro de ese pequeño universo estén otros en búsqueda de lo que en primera instancia te pertenecía. Sin embargo, otros llegaron al puerto y tomaron mis virtudes, entre frutos exóticos y hiervas medicinales para su mal de amores, mejorana y hierbabuena. De sus labios han salido buenos comentarios de lo que mi isla puede provocar aquellos que se atrevieron a explorar. Claro, ellos han tenido mucho mayor “valor” para proponerlo y entendería que tú te aguantas por la poca o mucha, no lo sé, diferencia de edad entre nosotros.
De cualquier manera siempre existe el verbo, pero a tí no te obedece y no es porque seas mudo o por qué estando conmigo te falten las palabras sino, tu modo de andar, tu peculiar presencia, tus gustos extravagantes y muchas de las cosas que te conforman me hacen pensar y sentir que posiblemente pudieras pasar a otro nivel. Sí, aquél en el que te permití, que con tus manos grandes te deleitaras al posarlas sobre mis montes nevados, haciendo en ese momento embravecer el río, previamente con sus aguas quietas y en calma y tú sin la posibilidad de poder contenerlo. Me dejaste peor de lo que fue; esos minutos en privacidad dentro de aquel pequeño cuarto donde ambos, brevemente, dejamos a flor de piel el aroma a deseo y besos impecables, tatuados en el cuerpo. No olvido el primer contacto entre nosotros, aquel beso que me arrebataste dentro de mi ingenuidad, donde me cuestione por algún tiempo si había sido verdad o sólo un sueño. Por la obviedad que hay ahora, no fue un ensueño, sencillamente fue la muestra de tu PODER sobre mi agitada exaltación de retomar un rumbo donde creía no volver a sisar.
Después de esta remembranza, me quedo con la duda ¿a caso serás lo suficientemente capaz de retenerme, o simplemente me tomaras como otra cosa más en tu vida? No tengo una respuesta aun y a pesar de la ansiedad que me provocas, no sé si pueda descansar de esa noche mágica, en la que me llevaste con tus encantos, cuestionamientos y halagos a una encrucijada entre el bien y el mal. Sí, mi parte pensante me dice que no dé lo que soy pero, por otro lado, mi sentir de sentires me dice todo lo contrario. Además en ese pequeño mundo donde todo se puede decir, a pesar del lenguaje que usamos, me causa un gran temor de aquellos que han cruzado mi limite donde el puerto se abre para su navegación, se hagan ideas erróneas. ¡Sí! La parte en la que se me tome como objeto y no como el ser humano que habita en este cuerpo. Ya no sé si es prudente añorarte o definitivamente olvidarte, por mi propia salud.

martes, noviembre 10, 2009

Pena???

¿De que me hablas tú? ¿No soy yo la que tiene que sentirse de esa forma? Si me dejaste sin decir palabra, solo dejaste un mensaje diciendo que estadas en tu propia recuepración, ¿y yo? ¿Acaso pensabas que tenía que seguir esperandote durante todo este tiempo, como pago de lo que sufrimos? Tú dices que no ha sido fácil para ti el superar lo que nos pasó, pero no fui yo la que te preguntó ¿Estás bien tú? A lo que contestaste, como buen macho, que ya habías pasado por tu propia recupración. Entonces ¿yo qué digo ahora? ¿qué hago en tu ausencia de semanas y meses? Ante tantas preocupaciones tengo que salir adelante, sin ti. Solo me dejaste una lección que nunca olvidaré, la cual es que estoy dejaste mas defraudada de lo que antes creia que fuera un hombre con las tres "F" y sigo con la idea de que si hay alguien para mi, me encontrará y sino... pues también no es el fin del mundo.

martes, octubre 27, 2009

Inaudito

No puedo creer que seas tan infame conmigo, que después de que todo lo que se construyó se haya ido muy lejos y para colmo, ¿cómo es posible que con tus miradas hagas evaporar las aguas de mis mares internos? Me he llegado a preguntar, muchas veces, ¿qué fue lo que me diste? Mis oscuras realidades se vuelven en suspiros de quinceañera, de una ingenua adolescente cautiva en una indiferencia que me envenena todos los días. No quiero pronunciar tu nombre porque con solo hacerlo me lleva a los deleitosos labios que provocan un deseo insaciable de tenerte en mi lecho y también en de aquel sitio donde la luna y las estrellas hablaron en nuestros oídos susurrándonos que esto no terminaría. Ingenua yo por creer que ambos habíamos escuchado esa suplica de los cuerpos en su vapor extasiante que provocaba que siguiéramos uno dentro del otro. Tu lumbre encendía mi esperanza y me daba el valor de continuar en donde estábamos; una lumbrera enorme donde nuestros cuerpos y almas se fundían.
Que gran desilusión al saber la verdad, si una verdad que no quería escuchar de tus labios, que al saberla no tenía el coraje para luchar por lo que me pertenecía, que eras tú. Por otro lado, estaba tu amigo; sí el que me llevó a donde tú no quisiste y todo porque tenías a la socia en medio de nosotros. ¿Qué vale más, una relación donde los celos dominan o una en la que el balance es la gran virtud? Es algo que me cuesta mucho trabajo entenderte, pero comprendo que muchas veces nos complicamos solos la vida, el mejor ejemplo, yo. No creas que fue sólo una variedad más dentro de los deleites del sabor a frescura que da alguien que, en alguna parte, está deseoso por probar algo que está a su alcance, que no tiene ningún contratiempo para la convivencia, estar ahí para ambos y no pensar que tienes que llegar a tal hora a reportar tu asistencia, ¿qué dudosa reputación tienes? Pobre ingenua, ya somos dos que estamos ahí, aunque cada una con su parte.
Ahora únicamente me queda agradecerte que me hayas dado la oportunidad de presentarme a tu amigo y que mientras lo que haya entre nosotros sea algo bueno para ambos, sólo te puedo decir, GRACIAS.

jueves, octubre 15, 2009

Ha pasado mucho tiempo...

¡Si! Ha pasado mucho tiempo, mucho tiempo desde que te deje llorando en la alameda, como dice la canción de "Este terco corazón". Si es cierto que hay veces que uno insiste en lo mismo, sabiendo que no hay más futuro, sino simple desilusiones... Duele tanto saber que nada es para siempre, que lo nuestro es un imposible. Ser el plato de segunda mesa es lo peor que un puede aceptar. Al corazón no se manda, tiene vida propia. Lo más doloroso es que tú no eres la persona que me devolerá la vida ¡si!, la vida entendida como los suspiros de la ilusión de verte cada día por las mañanas levantandote a mi lado, de sentir en las noche que llegas, después de un largo día de trabajo, que compartimos la mesa en las noches para cenar y conversar; la idea de prepararte algo que te deje un buen sabor de boca y premiarme con tus caricias y besos en nuestras "lunas de miel".

Como pasa el tiempo, el reloj no deja de andar con su TIC, TAC, TIC, TAC... recordando, sólo recordando que no estás, que has preferido otra vida lejos de mi; aunque soy honesta, las palabras del ADIOS salieron de mi boca. No toleraba más el tener en la mente la idea de que compartías la cama con otra, que ella tiene privilegios distintos a los míos de los que yo quise ser parte y aun así me duele haberte dejado ir.

Por las noches salgo por la calle esperando buscar algún consuelo, sea el viento, la lluvia, incluso la luna para evitar el que vuelvas a tomarme en esas fantasías que solo hacen que mis ojos se humedezcan y ya estoy harta de llorar por algo que nunca fue verdad.

Sé que me tengo que reponer, pero la piel tiene memoria; la dulzura de tus besos eran los que me hacían volver del letargo del día, solo esperaba a que cayera la noche para que tú llegarás y viera tus ojos luminosos por verme. Sólo eran mis fantasías, ¡si! mis fantasías absurdas de querer algo que no era verdad.

Ahora que toco el tema, me doy cuenta de lo débil que soy cuando se habla del corazón, si no tengo manera para llevar esta carga maldita en lo profundo de lo que llaman ALMA. Creo que la he destruido para no sentir nada después de que nos fuimos, ¿qué haré con este hueco en mi vida? No sé, lo que sé es que tengo "este terco corazón, no te olvida, no te olvida; aunque le busque un nuevo amor, cada día, cada día".

martes, octubre 13, 2009

No quiero ser tu novia

Y que decir que siendo una mujer en la plenitud de sus 30 lo único que me sale natural es ser hombre.Recuerdo cuando nos encontrabamos, apenas nos quedabamos solos y apresuradamente nos poníamos las manos encima con desesperación y no dejabamos de tocarnos y darnos placer. La última vez apenas llegamos casi terminaste...o más bien empezaste...a platicar, sí, a desahogarte como si fueramos las mejores amigas y mi cara de interes fingida me salía tan bien que no te diste cuenta... pero yo...YOOOO lo único que quería era coger.

No me quiero que me llames.

No quiero que conozcas a mis papás y tampoco te voy a presentar a mis amigos.

No me interesa ser tu novia.

La verdad, apenas recuerdo tu nombre.

Sólo te quiero coger ok?

miércoles, octubre 07, 2009

Sin palabras!!!

Hacía mucho tiempo que no sentía un abrazo calido, con verdadero afecto... Solo han pasado momentos de fiebres colapazantes imposibles de controlarlas al llegar a ciertos grados Celcius y por eso, me quedo más extraña de lo habitual.
Fue una velada muy rara, en la que de antemano pareciera una noche LOCA. Curioso fue que tuvo la delicadesa de ir a mi tiempo y ritmo.
Que locura es pensar después que con él se puede contar, que no es algo intangible como lo pensaba, todo lo contrario. El punto aquí es que él quiere TODO, ¡si! Todo lo que respecta a mi persona, pero es más mi propia vanidad la que omite todo comentario referente a una vida prolongada. Desde luego que desde que lo conosco él insté en lo mismo y varias veces le he tenido que cortar las ALAS porque puede caer muy, pero muy alto y no quiero ser la responsable por otra perdida humana que caiga en los obscuros caminos de perdición. Si es obvio que no sería culpa mía, pero no puedo evitar o tal vez me cuesta mucho trabajo superar aquello que se quedó. Hay un dicho "no hay que decir de esa agua no beberé, porque caes en el pozo" o algo así, no recuerdo. La cuestión es ¿será posible que me haya equivocado otra vez? Al final de todo, me dio mi espacio y me devolvió un poco de ¡PAZ!

sábado, octubre 03, 2009

Seca

No sé qué hubo diferente ahora. Seguías siendo tú, el mismo tipo de confianza al que sé que puedo recurrir si tengo ganas de una buena sesión sexual.
Seguía siendo yo, la que no quiere tomarte de la mano mientras entramos al hotel, la que no se acuerda de saludarte con un beso cuando te ve, ni espera un abrazo, ni caricias, ni palabras tiernas al terminar.
El tema es que mientras me "hacías el amor", yo no estuvé ahí. Por supuesto lo notaste inmediatamente y me dijiste: ¿Porqué estás seca?. Cuando escuché tu voz regresé un momento contigo, quise concentrarme y no pude. Terminaste. Nos besamos. Volviste a hablar: "¿Porqué no terminaste?" y sólo te pude responder con la verdad: No sé, hoy simplemente estoy seca. Después de un brevísimo silencio, nos reímos tantísimo por lo profundo de mi respuesta!!!
Ya cuando llegué a mi casa no me dió tanta risa. No tenía ganas de nada, de nadie. Me metí a bañar y mientras el agua caía en mi cuerpo, descubrí que no podía ni llorar. En serio me sentía seca.
Que miedo. Intento tocarme y pagarme el orgasmo que me quedé a deber hoy. Nada.
Entonces quise ponerme atención y advertir qué es lo que pensaba y que me tenía así. No estaba pensando en nada!!! También mi mente está seca.
Terminé mi baño, me puse mi bata y salí a sentarme en una de las sillas del jardín, fumando, meciendo mis pies, perdiendo mi mirada en el cielo y buscando un poquito de cualquier cosa que pudiera hacerme sentir algo........... y de nuevo nada.
Esto tiene que ser pasajero, esta no puedo ser yo, no puedo estar seca. No quiero.

jueves, septiembre 24, 2009

Curioso???

De un día para otro me decidí a dar el gran paso... No tenía idea de lo que sucedería después hasta que con varios mesajes vía cel se confirmó la visita guíada. Suena extraño aunque la verdad es una experiencia sumamente exitante. Al llegar al punto de reunión con mi guía sexo-espiritista, no me cupo la menor duda de que algo, más allá de lo que pensaba, podría suceder. En efecto, subimos al auto con dirección al punto estrategico y tomando las medidas necesarias de que no me faltase ningún detalle por mi propia seguridad. Entre los tantos mensajes que me envió, sugirió que agaurdará hasta la mañana siguiente en donde haríamos el ritual de iniciación, a lo que desde que salí de casa ya tenía un kid preparado para la ocasión. Todo lo necesario, desde cepillo de dientes, hasta ropa comoda por lo que llegará a decidirse posteriormente. Así que sin más que lo ya pactadó llegamos, un espacio amplio con una, más o menos, buena distrubición. La habitación fue la que si impresionó, amplia, grande, llena de luz de velas, una esencia aromatizando todo el lugar. Entramos sin mayores tapujos a lo que nos concernía a ese ritual de que tanto habíamos hablado en meses. Así que todo comenzó; primero me llevo a la habitación dejo mis cosas que él caballerosamente tomó cuando bajamos del auto, me dijo que me pusiera comoda que él regresaba en unos minutos. Al escuchar eso me hizo pensar, "¿qué carajos estoy haciendo aquí? ¿Qué puede enseñarme a mi?". En eso apareció totalmente desnudo por el quisio de la puerta sin quitar la mirada de mis ojos, inició poco a poco a despojarme lenta y sensualmente de mis prendas hasta llegar a la ropa interior donde fue que se detuvo unos momentos para sentir en sus manos, la seda de la que estaba fabricada mis prendas intimas. Fue entonces cuando su pene se incorporó, su brazo derecho rodreó mi cintura y su mano izquierda sostenía mi cabeza dejandome caer suavemente sobre la cama. Mis piernas se doblaron y levanté mi pelvis para que pudiera deslizar la tanga y él la dejara en el suelo. Lo consecuente a todo esta acción debido a esas reacción para liberar y equilibrar las evidentes contensiones sexuales de mil días... no es exageración en lo absoluto, como un buen guía sexo-espírutual no era de esperarse que la fricción de los cuerpos se limitara exclusivamente a un orgasmo fingido como muchos de los que tuve que hacer durante esos mil días de vida sin conexión con él otro, claro refiriendome a los inevitables encuentros con hombres que sólo les importaba sus propios instintos sin más que afrontar con un deseo para satisfacer a una mujer frívola y carismática. Si, esa es la visión que doy a muchos de ellos cuando los conozco, aunque en el fondo es otra cosa muy distinta.

Retomando los hechos del encuentro, fue una noche que no tengo que olvidar porque hizo que me estremeciera hasta la medula como hacia muchos años, ¡¡¡sí años!!! No habían tocado esas fibrar tan sensibles y mucho menos de la manera en que él lo hizo; ahora ya estoy descubriendo muchas otras cosas que únicamente la experiencia te enseña y por ende, hay que atreverse a conocerlas y sino buscarlas de alguna forma. Te preguntarás ¿cómo es que me di cuenta de que había llegado a la exaltación? No lo digo por ser obvia, lo que pasó fue que el mar de mis amarguaras se desaguó. Todo el flujo contenido salió como si a una presa le hubiese caído un rayo sobre su pared y la haya derrumbado. A su vez, mi alma, mi ser se sintió más ligero, mi cuerpo se soltó completamente, sentí que no estaba en la cama, mi mente tocaba el cielo, ¡si! Como una alucinación, un éxtasis la droga más poderosa que se puede tomar con solo besar. Después de eso él quedó totalmente agotado, no fue sensillo que me llevase tan fácilmente a esos grados de LOCURA, INSANIDAD MENTAL-SEXUAL a sabiendas que él es un experto, todo un conocedor de los bloqueos que tenemos algunos humanos por traumas, por miedos, por mil posibilidades que se dan en la vida. Así fue que salió de mi, a pesar de que mis brazos se encontraban rodeando su espalda haciendolo prisionero mio no quería que terminará, pero en eso me susurró al oído "no es bueno querer comerse todo un banquete en una sola noche, es bueno dejar un espacio para lo que venga, sea lo que sea." Con esas palabras lo solté y se fue al baño por papel, me dio todo el rollo para que limpiara mi selva. Lo tomé y lo hize, sequé mis labios y todo lo que estaba dentro. Me volví hacia un lado de la cama y deje un largo espacio para que él regresará y dejara su cuerpo sobre la misma. En esos momento no sentía que Yo estuviera ahí, así como cuando te levantas en las mañanas y al mirarte al espejo apareciera otra persona y no tú. Si, fue extraño y con una mezcla de emociones encontradas. Él sólo observó como me estaba sintiendo y volví a buscar su rostro cuando él entró en la cama a mi lado, en eso se hizo una breve conversación fugas de parte suya y al terminar lo que me dijo, sólo me quedé sonriéndole con unas lagrimas en mis ojos que inmediatamente él quitó con su mano suave y tiernamente. En eso mis ojos se cerraron solo escuché el palpitar de mi corazón, a lo lejos escuché como un auto frenaba en la avenida y de repenté sentí su brazo sobre mi espalda resguardándome de cualquier depredador y caí en un profundo sueño, hasta que el sol entró por la ventana. Mis ojos se abrieron al nuevo día que me aguardaba cuando de repente, todo al rededor se volvió sumamente familiar. La habitación era pequeña y todo estaba totalmente desordenado me incorporé y de inmediato me sorprendí de mi misma, ¿por qué? Estuve sumida en un extasiante sueño húmedo que me dejo una experiencia sumamente enriquecedora.

miércoles, septiembre 23, 2009

Dudas

Habías aguardado tanto para darme una señal de existencia, al darme cuenta de ese fragmento inspirador de lo que puede ser un reencuentro, aun cuando no existan los cuerpos, del roze de unas manos, el cielo en un llorar de alegría que entre sus lagrimas se vea el arcoiris llenando los labios de alegría y amor. Imagenes ante tus palabras y versos, ante el sueño y la ilusión, ¿o tal vez una alusinación creada por soledad y amargura? No sé, no tengo la suficiente noción de lo que pasaba por mi mente al escribirlo y dirigirlo a mi. Tampoco sé la intensión ya que, muchas veces hemos tocado el tema, la prosa, la rima, la emoción en si misma, que todas las palabras conllevan dentro de una pequeña y encantadora poesia. Se me ocurre que haya sido una inspiración ante la muerte de aquel gran poeta latinoamericano que dejo un vacio en las filas de las letras. Aunque aun no entiendo "por qué yo".
De cualquier manera el aprecio por el tiempo tomado para deleitarme con tus romantisismos son los que me devuelven la FE en que existe el AMOR no el que todos entienden, el de entrega exclusiva hacia el otro, sino a todo lo que está ahora en nuestras vidas.
Gracias por no olvidarte de mi.

martes, septiembre 22, 2009

Los hechos

Primero un beso, después un largo y penoso distanciamiento. Ahora que todo volvio a su inicio desde que comence a tratarte más como otro y no con la jerarquia de conocedores, algo pasó en mi en ese lapzo de tiempo.
Ahora se han vuelto más frecuentes eso encuentros fortuitos del destino, como una tentación e incluso como un delirio. Sí eso es, me doy cuenta que poco a poco estoy cada vez más interesada que me urge verte, aunque sea un momento ya que vuelve la esperanza de toparme contigo en medio de una multitud de "desconocidos". Además y haciendo memoria, el hecho de tocar algo era para mi importante porque eso hizo que me percatara de que no solo soy yo la que inicia el juego, por llamarlo de alguna maneralo, que está sucediendo entre nosotros.
A decir verdad contigo me he topado nuevamente con los DESEOS y para bien o para mal -no lo sé- estás en mi mente. Veo tu rosto, siento tocar tu cuerpo, pareciera que en la noche te veo entre mi lecho y aun así no sé lo que deseas, buscas en mi, la pregunta del millon para toda mujer sin lugar a dudas; aunque tal vez exagero en que todas seamos iguales, pero te aseguro que buscamos a la "pareja, al otro que nos complemente". No sé que hacer con todo lo que me está pasando, siento la necesidad de que me tengas entre tus brazos, sosteniendome fuetemente sin que yo tenga la posibilidad de soltarme, ¿a caso eso es lo que quiero? ¿Estás dispuesto a cumplirlo?

jueves, septiembre 17, 2009

Creador???

Ha pasado una noche en la que la bruma del cuerpo se hace espesa y cuesta trabajo levantar el espiritu después de una larga juerga.
No podía concebir despertar en cama ajena, ni encontrar otro cuerpo a mi lado. Todos mis pensamientos estaban desvanecidos y no había manera de recordarlos en ese frío que corría por todo mi cuerpo apesar de que las cobijas estaban encima de nosotro. No escuchaba ningún ruido, la luz del alba se introducia tenuemente por una pequeña ventana, ¿qué hacía yo en ese espacio desconocido? ¿Qué fue lo que pasó?
El rostro de aquel hombre no era reconosible por mis memorias y entre más me esforzaba por recordar dónde estaba no entendía nada en absoluto. Miré a mi alrededor, aquel hombre sin nombre estaba ahí y el miedo corrió por todo mi ser al acercarme a él, estaba frío, más que yo. Tomé su muñeca derecha para saber si aún tenía pulso, parecía muerto...
Salí lentamente de aquella cama, sin hacer ningún ruido, me puse a buscar todas mis prendas que se encontraban esparcidas por el piso. Tenía que quitarme, da alguna manera, ese frío; me vestí rapidamente para saber si me encontraba en todos mis cabales. En eso, el que se encontraba sobre la cama, se movió a la derecha de la misma en donde yo me encontraba minutos atrás. Eso me devolvió el alma al cuerpo, sabía que no estaba muerto... El temor había sido ocasionado porque ya había pasado algo similar y no quería que volviera a ocurrir. Sufrí mucho en aquella ocasión, lo que fue sencillo de superar era que ese hombre del pasado yacía en su tumba y de vez en cuando le llevo flores y recurdos, aunque el forence y la policia me creían culpable por aquel acto. Fue duro demostrar mi inocencia ya que, nadie sabía que dentro de mi vivé un ser que tiene hambre de hombre, de carne, de sangre y de un alma que viva en mi.
Por ello es que tuve tanto miedo al ver a ese hombre postrado, frío sobre la cama y que paresía haber sido presa de mi, estaba vivo ¿qué tan vivo? No lo sabía, pero respiraba lenta y pausadamente.
Ya con mis prendas sobre mi piel se volvió a mover y al hacerlo despertó extrañado al ver que no había nadie de aquel lado. Se levantó su torzo lo impulsó de la cama, su rostro voltió a su izquierda y no vió nada, yo quedé paralisada del otro lado sin hacer ningún ruido; a lo lejos se escuchó el ladrido de un perro. En eso se sentó en la cama y sus manos se fueron directamente a sus ojos para tayarlos y quitarse el cansancio. No respiré para que no se diera cuenta de lo que pasó, cuando se incorporó totalmente levantó su rostró y me vió aunque su mirada era rara, extraña, paresía que no me había visto. Fue algo extraño nunca había pasado por algo así.
Se levantó vio que la ropa estaba tirada sobre el suelo de forma que habiera sido quitada con estruendo, fuerza, pasión. Se me hacía tan bizarro el que no se diera cuenta de mi presencia. Se diriguio al baño frente a la cama, cerró la puerta. En eso escuché un sonido como de queja, dolor y sufrimiento, ¿qué estaba pasando ahí adentro? Fuí hacia la puerta para escuchar que era lo que sucedía y en eso abrió rapidamente la puerta y se topó conmigo. Su rostró se pusó palido como una hoja blanca e incluso transparente. Ambos nos paralizamos no sabiamos que hacer, fue entonces que dí dos pasos para atrás hasta toparme con el borde de la cama; sus ojos no me los quitaba de encima, no sabía que era lo que tanto veía, cuando me tomó de brazo derecho y me encamino hacia el espejo que tenía sobre la pared de frente a la ventana. La imagen reflejada no era la que yo recordaba, en verdad no era yo la que estaba dentro del espejo dentro de aquella verónica que parecia deformada. Lo único que pude hacer era que aquel hombre soltára mi brazo y salir corriendo de aquella habitación y al ver el otro cuarto fue como si un rayo callerá sobre mi. Todo volvía a mi mente, los recuerdos estaban presentes, vi entonces sobre un sofa mis cosas, bolsa y abrigo, las tomé escuché los pasos de aquel hombre que llevaba como nombre Claudio. Me dí la vuelta para verlo a los ojos y las palabras pudieron salir de mi boca. Él se encontraba totalmente desnudo, un cuerpo del que no existía nada que levantara mi interes visual, ni tampoco aquel ser que vive dentro de mi, le fue totalmente indiferente. Entonces comprendí que mientras los hombres estuvieran totalmente fuera de los parametros de belleza y de sasiar el hambre, no morirían a causa de una pasión desenfrenada. Así que las palabras que le dije en ese momento fueron, "gracias por la lección" a lo que Claudio se quedó extrañado por el sonido que entró por sus oidos. Así que salí de aquel lugar con dirección al automovíl que se había quedado en la calle de Tajín.

lunes, julio 20, 2009

En el Baño

Despúes de meses de coqueteos furtivos por fin pasó. Llegue al lugar y te llamé para que me ayudaras a entrar, eres clientazo! saliste por mí y ni bien entrabamos, en pleno pasillo me tomaste de la mano, me jalaste hacia tí con fuerza y con una mano tomaste mi cara y me besaste de la manera más cachonda que he conocido, tu otra mano estaba ocupada frotando mi sexo, así a medio pasillo en medio del antro más concurrido y con nuestros amigos a unos pasos. No me inmuté, la sorpresa no me dejo pensar en Carreño y el que dirán, nadie nos vio siquiera. Eso fue todo, pero ya sentía el deseo de tenerte entre mis piernas.
Semanas después volviste a repetir ese movimiento virtuoso y coordinado que me provoca humedecerme con sólo recordarlo, estabamos en esa fiesta, rodeados por todos, salía del baño y tu ibas, nos encontramos de frente en el pasillo, ni siquiera nos pusimos de acuerdo, sólo nos miramos a los ojos y ya sabíamos lo que pasaría. Lo volviste a hacer, esta vez me tomaste con fuerza, me empujaste contra la pared, te sentía totalmente erecto contra mí, me jalaste hacía el baño de mujeres, entramos a uno. Tu lengua recorría mi cuello y chupabas mis pezones, tus manos recorrían todo mi cuerpo, una tomaba fuerte mi cabello, la otra se escabulló dentro de mi pantalón y se quedo entre mis piernas yo hacía lo mismo, te sentía tibio y fuerte a la vez, me gusta sentirte entre mis dedos, de reojo nos miraba en el espejo , la adrenalina y exitación me hacían respirar agitadamente, tú mirmurabas palabras de cama, "Que rico te mojas" me decías. No tuvimos el valor de terminar lo que empezamos, saliste y me quede esperando un par de minutos para disimular, no sé que me provoca más, tu cachondez o el secreto que guardamos en la cara de todos... o tal vez serán las dos cosas.

domingo, julio 19, 2009

¿A qué sabes?

¿A qué saben tus besos?
¿A qué sabe tu piel?
¿A qué saben tus sueños y tus secretos?
¿A qué sabe tu voz cuando la dejas salir bajito y al oido?
¿A qué saben tus labios cuando callas?

¿A qué te sabe saber que me derrites?
¿A qué te sabe dejarme así, con este deseo de tí?

Quiero probarte. Morder tus labios, apretar tus brazos, enredar mis dedos en tu cabello, sentir tu respiración en mi cuello.

Quiero probar tus manos en mi cuerpo.

¿A qué sabes cuando estás solo?

¿A qué me sabrías si no estuvieras lejos aún estando frente a mí?

¿A qué sabes?

sábado, julio 04, 2009

No fue bueno, pero fue lo mejor

¿Te ha pasado algo que sin ser malo no es del todo bueno y de sobra sabes que es lo mejor que pudo suceder?
El y ella viven juntos y se aman. El y yo..... digamos que califica en el top cinco del mejor sexo que he tenido en mi vida, pero sólo eso. Cariño sí, pero no amor. Un poco de confidencias, al grado de hablar de ella como lo haría con una verdadera amiga y al grado de hablar de mi vida como lo haría con un verdadero amigo.
El capítulo con él tiene que cerrarse. Sí, estoy harta de la hipocresía burguesa, pero también creo en el karma y ahora viene en camino un tercero pequeñito que no tiene porqué pagar las consecuencias. En alguien tiene que caber la cordura.
No voy a negar que me quedo a medias, con unas ganas locas de volver a estar con él repitiendo la sesión sexual que tanto encanto me provocó.
El todavía no lo sabe, pero se lo diré así, claramente como siempre se manejó todo entre nosotros. Es un tema que toca la vena sensible, MI vena sensible. Por lo mismo no daré más detalles.
Sobre este final precipitado sólo puedo tomar prestado el título de una canción de Bunbury y Vegas que lo describe perfecto:
No fué bueno, pero fué lo mejor.
Así que a escribir otro capítulo, uno donde la protagonista sea yo.

lunes, junio 29, 2009

A Hurtadillas

Mi miras, yo ya sé que debo empezar a despedirme de todos con una sonrisa discreta.Dejo pasar algunos minutos antes de salir tras de ti.
Espero dentro de mi auto a que salgas del estacionamiento, mientras pienso en tus labios que tanto me gustan.
Me gusta cuando bajas de tu coche y te acerca a mi ventanilla, bajo el vidrio y tú acercas la cabeza, me besas sin aviso, metes tu lengua tibia dentro de mi boca y dejo que tu mano se deslize dentro de mi blusa, las puntas de tus dedos tocan mis pezones, apenas rozándolos, me humedezco.
Me gusta por que no pides permiso, por que no tienes miedo, por que me me miras y me dices, "sigueme" y yo sólo atino a asentir con mi cabeza...ya sé cual será el final.

viernes, junio 26, 2009

Mi primera vez contigo

El solo hecho de pensarte me provoca un calor terrible, un deseo intenso de tenerte conmigo y haciéndome tuya como ese martes.
Mi mano llega a mis labios que recuerdan tus besos y comienza a bajar hasta mis senos... con solo pensarte mis pezones están erectos, como esperando estar de nuevo en tu boca, sintiendo tu lengua caliente acariciarlos.
Entonces viene el "flash back" y tengo que cerrar mis ojos pues te recuerdo claramente, te siento como si estuvieras aquí, como aquél día.......
...........entonces comenzaste a besar despacito cada pedazo de mi cuerpo, cada pliegue, cada palmo, tu lengua paseaba en mi piel sin detenerse ante nada, sin respetar fronteras aún cuando con mis manos intentaba evitar que llegaras a alguna parte de mí que no me encanta, tus manos detenían las mías con una fuerza tal, que me rendía y eso me excitaba más. Tanto, que cuado noté que llegaste a mi sexo quise detenerte nuevamente y no pude más. Me rendí completa, me entregué toda.
Tras un breve y placentero encuentro entre tu lengua y mi clítoris, decidiste no esperar más. Te levantaste decidido y elevando mis piernas con tus manos, una a cada lado de tu cuerpo me penetraste lentamente. Poco a poco, sin prisas, como intentando llegar cada vez más lejos, cada vez más adentro y podía sentir mi humedad ayudándote a avanzar cada milímetro y mojando esa parte de tí que en ese momento, fué mía.
Cerré mis ojos al sentirte en mí. Al abrirlos, tus ojos se clavaron en ellos y entonces te inclinaste hacia mí mientras decías: "Estás hermosa". Conseguiste estremecer cada poro. Nos besamos. Seguías moviéndote, seguías entrando y saliendo, seguías provocando que mi cuerpo temblara y que no pudiera callarme esos ruiditos de placer que de repente te hacían pensar que me lastimabas cuando en realidad me hacías sentir más viva que nunca.
Una de tus manos en mi cabello, la otra acariciándome los senos, mientras el resto de tu cuerpo seguía un compás que iba aumentando de ritmo. Era inevitable que mi cadera te acompañara en él y comencé también a moverme mientras con mis piernas te abrazaba a la altura de tu espalda y mis manos apretaban y acariciaban de a poquito y con mucha fuerza tus brazos y la parte de atrás de tu cuello.
Te recostaste junto a mí y yo inmediatamanete me puse encima de tí. Mi mano llegó hasta tu pene erecto ayudándote a penetrarme nuevamente. Volvió a recorrerme un escalofrío en cada centímetro y comencé a balancearme en ese sube y baja maravilloso que es tu cuerpo. Tomé tus manos y las puse en mis senos mientras disfrutaba ver como tu cara reflejaba placer........ "¿Te gusta?" y me respondiste apenas...... "Sí".
Nuestros ojos se encontraban de repente y así tan cerquita, tan adentro, no fueron necesarias más palabras.
Volvimos a la posición original. Comenzaste a moverte más rápido, a penetrarme más duro, comencé a morderte los hombros y a gritar un poquito más. Estábamos muy cerca del final y comencé a pedirte...... "Más, más.... así..... fuerte".
El sudor de tu cuerpo se mezclaba con el del mío, nos estábamos besando y tu movimiento era simplemente delicioso. Lo estaba disrutando tanto!!
Tu pecho estaba completamente contra mí y tu corazón palpitaba tan fuerte que lo confundí con el mío. Entonces, al mismo tiempo, llegó el momento.
Terminaste dentro de mí, sentí algo muy caliente que me recorría por dentro, mientras los músculos de mi vagina se contraían y te apretaban con toda la fuerza posible. Me mordía los labios y apretaba mis ojos, disfrutando de un orgasmo de lo más intenso y delicioso. El sonido que hiciste me dió ganas de no soltarte y tus manos me apretaron fuerte los hombros.

jueves, junio 25, 2009

La primera vez

Subí apurada las escaleras, tenía la casa para mi sola y quiera aprovechar, seguramente mis papás no tardarían mucho en llegar.
Así que me fui desvistiendo en mi camino al baño, dejando ropa regada a mi paso. Abrí la regadera, me gusta mucho sentir como caen las gotas sobre mi cuerpo. Me apresuro, salgo sin secarme, las gotas van recorriendo mi cuerpo y van cayendo al piso, todo mi camino esta marcado por gotitas.
Llegó al espejo, me miró fijamente, me gusta verme, me gusta pasar mis manos por mi cuerpo. Toco mi cuello y paso mi dedo índice por el hueso que va de mi hombro me gusta como se ve, bajo hasta tomar mis senos, son redondos y firmes, es mi parte favorita, aunque me gustaría que fueran más grandes. Miro mi obligo, tiene forma de flecha, no es redondo ni botado como algunos que he visto, bajo mi vista y me detengo en mi sexo, me gusta como se ve, el vello es poco aún y he comenzado a depilarlo como lo ví en aquella revista y ahora tiene forma de un triangulo, me divierte verlo.
Me volteo de a poco, alcanzo a ver el fin de mi espalda, veo mis nalgas me detengo en el triángulo que forma su unión, se ve bien, mis manos pasan apenas tocando con la punta de los dedos, sigo hasta mis piernas, las estiro, se ven fuertes y marcadas, practicar la danza por años ha tenido algún beneficio.
Me miro una vez más antes de empezar a secarme, me gusta lo que veo...y se me empiezan a ocurrir varias formas de usarlo.